El amor a la verdad

*A continuación ofrecemos un extracto traducido de la presentación que realizó Heinz Kohut durante la Segunda Conferencia del Pre-Congreso acerca del Entrenamiento Clínico, en julio de 1967, titulada “La evaluación de los candidatos al entrenamiento psicoanalítico”. En esta ocasión, el autor hizo referencia a una carta en la que Anna Freud da respuesta a un joven de 14 años, quien le cuestionó: ¿qué se necesita para ser un psicoanalista?

“Hace algunos años, después de dar clase en una universidad lejana, acudí a una recepción en la casa de un colega psicoanalista. Lo que ocurrió fue que enseguida me sentí como un extraño entre todas aquellas personas que se conocían bien entre sí y me encontré a mí mismo platicando en un vestíbulo aparte con un muchacho como de 14 años, quien era hijo del colega anfitrión del evento. Me comentó que estaba en apuros con una tarea del colegio con respecto a su plan de vida profesional y que contemplaba la posibilidad de  convertirse en un analista, al igual que su padre, pero que sentía la necesidad de orientarse con alguien que no fuera de su familia. Preguntó mi opinión si sería buena idea escribirle a la señorita Freud para pedir su consejo. Le dije que me parecía una estupenda idea y, por lo que sabía de Anna Freud, estaba convencido de que le daría respuesta. Al siguiente día partí de regreso a casa, pasaron algunas semanas y me olvidé del suceso, cuando con gran alegría recibí de mi colega, el padre del muchacho, una nota con la que me expresaba su agradecimiento por haber animado a su hijo y, como suvenir, adjuntó una copia fotostática de la respuesta que ofreció Anna Freud a la pregunta del jovencito, la cual dice:

Querido Juan,

Me preguntas cuáles creo que son las cualidades esenciales que requiere el futuro psicoanalista. La respuesta es relativamente sencilla. Si lo que quieres es ser un auténtico psicoanalista, debes tener un gran amor por la verdad, tanto por la verdad científica como por la verdad personal, y es necesario que coloques esta apreciación de la verdad por encima de cualquier disgusto que pueda causarte el encuentro con temas incómodos, ya sea que éstos pertenezcan al mundo externo o a tu propia persona.

Más aun, pienso que el psicoanalista debe tener… intereses… que sobrepasen los límites relativos al campo de la medicina… Interés en cuestiones que pertenecen al área de la sociología, la religión, la literatura [y] la historia… [De otro modo,] la perspectiva que obtenga el analista de su paciente se quedará demasiado estrecha. Este punto se refiere… a una preparación que va más allá de los requisitos que se les pide a los aspirantes al estudio del psicoanálisis en las universidades. Es necesario que seas un buen lector y que te acerques a la literatura de diferentes países y culturas. Entre las grandes figuras de la literatura encontrarás algunas personas que conocen tanto de la naturaleza humana como los psiquiatras y psicólogos procuran hacerlo.

¿Esto responde a tu pregunta?

La carta anterior expresa de manera sencilla y directa una perspectiva que muchos analistas compartimos junto con Anna Freud en nuestra profesión [… Sin embargo,] sabemos bien […] que una cálida y encantadora carta dirigida a un jovencito de 14 años acerca de lo que forma a un analista, no puede sustituir el entendimiento que con gran esfuerzo se obtiene a través de la experiencia, el estudio y el debate. Pero, también, cuando las discusiones se frenan ante un impasse externo o interno, se hace necesario que recordemos dicha frase: ‘Si lo que quieres es ser un auténtico psicoanalista, debes tener un gran amor por la verdad’.”

Referencias

Kohut, H. (1968). The Evaluation of Applicants for Psychoanalytic Training1. Int. J. Psycho-Anal., 49:548-554

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